No tuvo la posesión del balón como profesó, no buscó en desesperación el arco de Ter Stegen, y por supuesto no fue más que su rival, el cual si no fuera por el portero Joe Hart, le habría encajado una goleada de proporciones.
El Barcelona avanzó a 4tos de final sin Claudio Bravo, ya que en la Champions el arquero alemán viste de titular desde que comenzó el torneo. Los culés vencieron por la cuenta mínima, tras un lindo sombrero de Rakitic (31'), quien recibió un pase magistral de Lionel Messi, el cual realizaba su clásica diagonal por la derecha apilando rivales.
Antes de la conquista y después de ella, el elenco español sumó una gran cantidad de llegadas que en su mayoría fueron repelidas por el guardameta visitante, convirtiéndose así en la figura de su equipo. La rapidez de los catalanes era demasiada para la defensa "ciudadana", que sucumbía ante los cambios de ritmo que daban Neymar, Suárez y la "Pulga" en cada contragolpe que parecía gol seguro.
Los desafíos para ambos elencos muestran realidades completamente diferentes: Pellegrini y sus dirigidos, con toda la prensa inglesa en contra y muchas dudas sobre el ambiente del camarín, apuestan a la Premier League, donde escoltan a un sólido Chelsea 6 puntos por arriba y con un cotejo por disputar; en cambio el "Barça" está vivo en todas las competencias, es finalista de la Copa del Rey, está entre los 8 mejores de la Champions, y puntero en la Liga BBVA, que tendrá el partido estelar del mundo y del momento: el "Derbi" contra el Real Madrid, a 1 punto de diferencia en la tabla a favor del equipo culé.
Por Vicente Vásquez Feres
